Mi vida sexual y otros relatos: Ishinomori y el erotismo


Creo que uno de los autores de manga clásico mas desconocidos en España es, sin duda, Ishinomori.

Autores como Tezuka, Koike y Kojima o Hirata han probado ser una apuesta rentable en nuestro mercado, sin embargo, parece que obras como Relatos de Sabu e Ichi, Hokusai o Musashi no han vendido lo suficiente como para ameritar la llegada de mas material del maestro Ishinomori.

                                Varios de los personajes mas emblemáticos creador por Ishinomori

Hace unos meses Satori editó este volumen donde se recopilan varias historias de corte erótico que el mismo autor editó en diferentes revistas a lo largo de su carrera, siendo un curioso pero a la vez interesante intento por parte de la editorial de recuperar al autor.

La obra se divide en relatos autoconclusivos, siendo la historia principal, Mi vida sexual, una serie de tres historias consecutivas.
El resto de obras que componen este tomo son muy variadas y ofrecen diferentes temáticas, desde obras con un marcado estilo cómico como Mochi, obras con un fuerte componente de ciencia ficción como Trampantojo a otras con un componente mas psicológico como La habitación del mar.



En la mayoría de estas historias el erotismo suele ser el detonante de la historia pero no el fin, derivando en otros géneros y marcando una fuerte personalidad en cada relato.
Así tenemos historias con un componente erótico casi nulo como Psicodélico y otras como El caballo azul, donde seguimos la historia de Mochizuki y su despertar sexual.



El estilo de dibujo bebe mucho de los diseños caricaturescos de Tezuka, sin embargo, en las composiciones de las viñetas es donde el verdadero estilo de Ishinomori reluce, teniendo un marcado carácter cinematográfico y presentando composiciones asombrosas.



Si nos quedásemos solo con esto el volumen podría pasar como un volumen interesante, divertido para pasar un buen rato o quedarse como una curiosidad en la edición de manga en español.
Sin embargo, este tomo va mas allá y en medio de estas historias de tintes humorísticos, trágicos o ficticios encontramos la serie que da nombre a esta antología: Mi vida sexual.

Esta serie (originalmente compuesta de 5 relatos y no solo 3 como nos presenta Satori) está dividida en 3 partes, cada una dedicada a un tema y siendo independiente entre sí.

Sexo en el recuerdo: A pesar de que es la historia menos transgresora (ya veremos por que) esta historia habla de manera directa del  aburrimiento del sexo dentro de una pareja, pasando de la euforia inicial al hastió y al desagrado en última instancia.

Sexo aberrante: En esta historia un maestro del manga es llevado por Inoue, su antiguo alumno, a una espectáculo sadomasoquista.
Si bien la historia puede parecer una excusa para tocar el tema del sadomaso (y lo toca de manera gráfica) Ishinomori aprovecha para criticar a la superficialidad de la sociedad basada en mantener las apariencias sociales e, incluso, llega a hacer una crítica abierta al mundo editorial del manga.


Sexo de perversión: En esta obra aparece el propio Ishinomori hablando directamente con el lector sobre el sexo, en este caso la reflexión de Ishinomori toma como base el narcisismo y la búsqueda del placer individual para justificar la existencia del mismo, para, unas paginas después, pasar a una fuerte crítica al capitalismo,al nacionalismo y el patriotismo, simplemente bestial.


Como ultimo relato el tomo recopila una breve historia sin ningún tipo de dialogo donde Ishinomori muestra varias anécdotas que vivió en los apartamentos Tokuwa-cho, una curiosa forma de cerrar este recopilatorio.

Para finalizar, ¿merece la pena Mi vida sexual y otros relatos? Como fan no solo del manga clásico, si no también del manga experimental y diferente es un claro si.
Ishinomori no solo crea historias entretenidas, también vuelca su pensamiento en historias que intentar ser algo mas que un mero pasatiempo.
Su estilo de dibujo es impresionante y merece la pena solo por las preciosas ilustraciones que lleva a cabo.
Quizá la única pega de la obra sea la edición, con páginas amarillas que transparentan y con un volumen que, aunque flexible y cómodo de leer, no está hecho de los mejores materiales y es muy fácil que se deteriore rápidamente.
Supongo que era esto o no poder disfrutar del volumen, por mi parte no me arrepiento del dinero que invertí en este manga, sin embargo la decisión final la tiene cada comprador, yo solo puedo animaros a que le deis una oportunidad en base a mi experiencia.

Y sin nada mas que añadir, me despido hasta la próxima entrada.


Comentarios